Electroterapia en fisioterapia: ¿Qué es y cómo funciona?

La electroterapia en fisioterapia se usa habitualmente por sus demostrados beneficios. Estas corrientes eléctricas aplicadas de forma local consiguen efectos realmente sorprendentes. Por este motivo, actualmente, es casi imposible acudir a una sesión de fisioterapia donde no se emplee este método.

Qué es la electroterapia

Como ya te adelantábamos, la electroterapia consiste en la aplicación de pequeñas corrientes eléctricas con fines terapéuticos. Se podría definir como la ciencia que emplea el tratamiento de las lesiones por medio de la electricidad. Ya en tiempos de los griegos se usaba la electroterapia en fisioterapia. Así que, como podrás comprobar es una ciencia muy antigua que ha evolucionado, hasta día de hoy, dando lugar a los famosos TENS.

Los TENS, son estimuladores eléctricos de alta o baja frecuencia, que se aplican a los pacientes en las zonas a tratar. Ahora bien, hay diferentes tipos de electroterapia, o mejor dicho de formas de aplicar la electricidad. Tenemos los TENS, electro estimulación, los microondas, los ultrasonidos y las corrientes galvánicas (lontoforesis).

Todos estos métodos consiguen el mismo resultado, que no es otro que un efecto de calor, que a su vez produce efecto electroquímico, así como magnético. Con todo ello el uso de la electroterapia en fisioterapia se ha convertido en una de las técnicas más efectivas para tratar lesiones y problemas en las articulaciones.

Pero veamos cómo funcionan estos diferentes métodos de electro estimulación y qué resultados se consiguen.

Tipos de electroterapia

En primer lugar, están los EMS y los TENS, los primeros son electro estimuladores musculares que se usan para recuperar la fuerza muscular y su capacidad contráctil. Los segundos, cuyas siglas derivan de: Transcutaneous electrical nerve stimulation, es decir, estimulación eléctrica transcutánea de los nervios. Estos, se utilizan sobre todo para disminuir el dolor actuando sobre las fibras nerviosas musculares.

En segundo lugar, tenemos los microondas, que se usan para proporcionar calor en los tejidos más profundos. El uso de los microondas, quizás sea el menos extendido, pues no puede utilizarse en todo tipo de pacientes. Las mujeres embarazadas, las personas con prótesis o marcapasos no podrían ser pacientes de esta técnica de electroterapia.

Luego están los ultrasonidos, que usan un gel conductor para llegar a las capas más profundas del tejido muscular. Se utilizan sobre todo con efectos antiinflamatorios, y en casos de tener que tratar lesiones en tendones, bursitis, capsulitis, etc., pero también debe evitarse en los mismos grupos de personas que los microondas.

Por último, la lontoforesis, que es quizás la técnica de electroterapia usada en fisioterapia menos conocida. Para llevar a cabo esta técnica se introducen determinadas sustancias químicas en la piel a través de una corriente galvánica. Su uso está indicado sobre todo para las lesiones de músculos y tendones, y la función es mitigar el dolor.

Beneficios

Sea la técnica que sea, los beneficios de la electroterapia en fisioterapia son múltiples, entre ellos: es un método antiinflamatorio, analgésico y térmico que mejora la potencia neuro muscular, disminuye los edemas, controla el dolor, mejora el trofismo, fortalece los músculos y mejora la sanación de heridas.

Con todo ello, también existe la electroterapia estética, con grandes resultados a la hora de combatir la flaccidez, reducir la arrugas y mejorar la circulación. Como ves, los beneficios de la electroterapia son múltiples.